Evolución mutante.



Al cáctus diminuto,
alojado
en una diminuta maceta,
le han salido unas flores
diminutas,
que expresan,
su voluntad de pervivencia.

Una de ellas, está formándose.
La otra,
completamente abierta
y las dos, tras la evolución
de siglos,
seguirán mutando
para tras un tiempo
que no conoceremos,
ser más resistentes;
a los vientos, a los soles,
a sus propias necesidades
desde aquella
diminuta maceta...

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6 comentarios:

Nerina Thomas dijo...

Una bella descrpción amigo. hERMOSA FLOR, CON TODA SU BELLEZA.
Un cariño

Raquel T. dijo...

Y aquí lo contrario, amigo Jaclo, otra complejidad, pero esta vez, la de la vida, que intenta siempre su persistencia, que aparece en cualquier parte, que muda para adaptarse a la vida misma. Estupenda dualidad la tuya de hoy, Jaclo, dos buenas reflexiones en verso que incluyen las dos caras de la moneda que no es suficiente para pagar nuestras dudas vitales...
Abrazos de dos en dos...

Nine dijo...

Hace tiempo que no cuido un cáctus, a los mios no le salían flores, pero hay ver en que clima se criaban...mucho frío y casi sin verano, ha cambiado mucho el clima desde entonces.

Preciosas las palabras que dedicas a ese diminuto cáctus, con amor y calor se hará grande.

Saludos.

Jaclo dijo...

Buenas noches, Nerina.
Como siempre gracias por tus gratas palabras.
Saludos

Jaclo dijo...

Gracias, Raquel por tu visita, por tus frases y por tus abrazos.
Saludos

Jaclo dijo...

Nine:
Te agradezco tu visita, tus palabras gratas y sobre todo que sigas el blog.
Saludos