Y luego, cuando pasadas horas
del suceso, pude hablar con alguien,
me preguntaron:
-¿Qué era? ¿Qué forma tenía?
-No podría decir...
-Pero ¿era grande?
-Enorme.
-¿Te asustaste?
-Nó. Sin saber por qué, me aportó paz.
-Pero, ¿cómo era?¿emitía luz?
-Sí., pero era una luz, como fría y azulada
-¿Estás seguro de lo que viste?
-No estoy seguro de nada.
-¿Entonces?
-Entonces, nada...
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